La última pincelada de un artista arequipeño

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La última gran obra de arte que hizo fue pintar sonrisas en las caras de aquellos que recibieron su donación. Al fallecer Luis Quispe, Arequipa perdió a uno de sus pintores más amables. Con el pesar de sus familiares, estos hicieron la última acción que él hubiera querido: donar algunos de sus órganos a otras personas que los necesitaran. Incluso otras instituciones -fuera del rubro artístico- dieron sus sentidas palabras ante el deceso del pintor.

Un pincel que no pinta más

Varios titulares circularon sobre el descubrimiento del cuerpo de Luis Quispe, quién apareció golpeado y sin sus pertenencias en Paucarpata, Arequipa. El deceso del pintor fue por muerte cerebral, según los medios locales que publicaron la terrible noticia el día 11 de julio de este año. 

La partida ha sido dolorosa tanto para amigos, familiares, colegas artistas y múltiples personas e instituciones más. Entre las publicaciones que hay sobre el hecho, está la realizada por la Escuela Profesional de Turismo y Hotelería de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA), dando el pésame en sus redes sociales -el mismo 11 de julio- a quién fue su alumno hasta el año 2012, cuando egresó. La misma universidad hizo lo mismo desde su cuenta principal el mismo día.

“Esfera Temporal” – óleo sobre lienzo (Foto. Difusión).

Su faceta artística

Luis será recordado como un gran artista que supo generar un estilo propio, gracias a sus particulares inspiraciones y trazos. En el mundo artístico, Luis era conocido como “Luis Quma”. Según la fundadora del proyecto Aquelarre, Verónica Torocahua, él era una persona ecuánime, espiritual y sesuda que reflejaba esas características en su producción artística.

“En cuanto a la difusión de su trabajo, a diferencia de otros artistas, se caracterizó por ser discreto; la necesidad de exponerse y mostrar su trabajo lo tenía sin cuidado, trabajaba sereno y sin prisa en su espacio/taller”, cuenta Verónica. Asimismo, la artista detalló que la principal inspiración de Luis Quma eran los textos sobre el ser, el universo, la mitología, la ritualidad del mundo antiguo, el despertar de la conciencia, etc. 

A pesar de que sus obras se expusieron en pocas exposiciones colectivas (resaltando la tercera edición del “Proyecto Aquelarre” en el 2017), Luis tenía planeado realizar su primera exposición individual. Verónica Torocahua señaló que están en conversaciones con la familia para que este evento se lleve a cabo, y así se cumplan los anhelos que tenía Luis con esta muestra pictórica.

“Aliens y cosmogonía andina” – óleo sobre lienzo (Foto. Difusión).

La última gran obra

Lo realmente admirable fue la decisión de sus familiares al autorizar la donación de los órganos del artista. Decisión que saben que es lo que Luis hubiera querido, debido al carácter amable y bondadoso que mostraba a quienes lo conocían.

Después de que sus riñones sirvieran para salvar la vida de dos personas en Arequipa, el resto de los órganos donados (corazón, hígado y pulmones) fueron enviados a Lima para ayudar a otras cuatro personas que sentirán ese apoyo que rara vez se brinda. Esto basado en que, según el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), en 2021 solo el 12.84 % de peruanos aceptaba donar en su Documento Nacional de Identidad (DNI). Una de las 3 millones 129 mil 869 personas dispuestas a otorgar una pequeña parte de su cuerpo al prójimo era Luis Quispe.

Por Orly Vides (Orlando Cáceres Vides).

Fuente: Entre Líneas Cultura.

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