Wilfredo Salhua Ccallo, abogado apoderado de Sedapar, junto con un grupo de personas, intervinieron un domicilio en el Cercado que poseía y posee una deuda de casi S/10 000 por 107 meses de servicio de agua. El representante explicó que, al estar la caja de registro de agua al interior del predio, realizar el corte del servicio resultaba enrevesado. Entonces, se optó por realizar varios trabajos para ingresar a la matriz de agua.
Esta situación se dio a conocer después de una demanda presentada por los herederos del propietario fallecido. El documento sustenta que se trataría de una usurpación irregular durante la pandemia.
«No es posible que un predio ubicado en el centro de la ciudad, mantenga una deuda tan inmensa», aseveró Salhua Ccallo, actor legal de la entidad.
Asimismo, el abogado declaró la necesidad de posicionar los predios al exterior, dado que aún se vienen registrando usos irregulares del servicio. Esto calificaría como hurto, según Salhua.
